A principios del mes iniciamos una serie de post sobre trampas y engaños en el mundo de la construcción y las reformas con la intención de concienciar a los clientes de la importancia de informarse bien antes de decantarse por un profesional u otro y solo contratar a profesionales con experiencia comprobada y clientes satisfechos.
Si en el primer post de la serie os mostramos algunos de los problemas leves más frecuentes, hoy subimos un peldaño y os ponemos en alerta sobre trampas y engaños graves, o lo que es lo mismo: fraudes. Toma nota, ¡y no caigas!
Presupuestos sospechosos
Cuando recibes un primer presupuesto y es ínfimo, hasta el punto de que no te salen las cuentas (costes mínimos de materiales, mano de obra, etc.), sería un buen motivo para hacer saltar todas tus alarmas. Y es que el fraude que describimos a continuación, es más común de lo que parece:
La empresa solicita un primer pago para la compra de materiales. Dado que no es un gasto demasiado elevado, el cliente desembolsa la suma. Hasta aquí, todo bien, pero el problema llega cuando la empresa desaparece dando largas o, en ocasiones, sin mediar palabra. Entonces, el cliente se da cuenta de que los materiales –que han quedado abandonados en su casa u oficina– no solo son de baja calidad, sino que están más que usados. La empresa ha cobrado sin trabajar y la reforma no va a realizarse.
Una variante de este mismo engaño es el de presentar un presupuesto cerrado pero igualmente demasiado bajo como para cubrir la mano de obra o el gasto en materiales. No se trata de un error, sino de algo intencionado. Y es que, por desgracia, los “profesionales” contratados no tienen intención alguna de finalizar la obra.
Algunos casos reales
En el programa “Constructor a la fuga”, de la Sexta, Antonio Hernández se encargaba justamente de solucionar fraudes en los que clientes habían sido estafados por contratistas sin escrúpulos:
El siguiente también es un caso real, publicado en un foro online:
He contratado una reforma de un piso mediante un contrato con una
empresa de reformas. El piso en origen lo empecé a reformar yo mismo y
tenía ya quitados los azulejos, picadas las paredes, las rozas, tubos
de cable y automáticos y retirada de escombro. A partir de ese punto
la reforma que contrato incluye todo: tarima flotante, puertas
interiores y exterior, ventanas, electricidad, fontanería, yesos y
pintura de paredes, alicatado, sanitarios, aire acondicionado. Sobre
un presupuesto de 16 mil euros la forma de pago es 6000 al inicio
otros 6000 con el alicatado y fontanería y el resto a la terminación.
Una vez empezada la obra el contratista me pide que le diga los
azulejos con intención de colocarlos al empezar y así pedir el segundo
pago quedando de esta forma pagada casi la totalidad del presupuesto y
quedando pendiente de hacer casi todo. Como me niego llegamos al
acuerdo de que pone primero los yesos y luego alicata. Antes de
terminar los yesos y con 6000 euros ya pagados me pide y le doy otros
3000 mil ya que parecía que iba a terminar con el yeso, pero no es así
y empieza a alicatar. Antes de terminar de alicatar me vuelve a llamar
para que le vuelva a pagar otros 3000 euros, le digo que le pagaré los
3000 cuando termine de alicatar, termine con los yesos y arregle cosas
mal hechas ante lo cual me dice que le trato de engañar y que abandona
la obra (con 9000 euros en su poder). Durante la obra ha cometido todo
tipo de irregularidades: tubos corrugados cortados, aplastados,
enchufes a alturas diferentes, yesos huecos y agrietados, azulejos
huecos (a pegote), cenefa de ducha partida por grifo de ducha, bote
sifónico en la cocina, tomas de agua mal puestas y un largo etc. El
día que se fue precipitadamente se ha llevado material mió: rollos de
cable, escalera, clemas. Ese mismo día cambié la cerradura.
Descubre cómo este cliente puso solución a su problema en el hilo del foro; aquí.
¿Te has topado alguna vez con este tipo de “profesionales”? ¿Cómo le pusiste solución al fraude? ¡Cuéntanos!
Muchas gracias por esta información, sin duda tenemos que tener cuidado con este tipo de estafas. Excelente artículo